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Algunos Aspectos del Presupuesto General de Colombia para el año 2.025.

El  Presupuesto General de la Nación (PGN) para el año 2.025 presentado por el gobierno al Congreso para su discusión y posterior aprobación tiene un valor de $523 billones (b) superior 3.9% al del año 2.024.

 

Por definición el PGN debe tener  aquel valor igual en los ingresos y en los gastos por lo cual en este caso según las instrucciones del  PGN de 2.025 a  los ingresos que totalizan $511 b se le adicionan  $12 b de una Ley de Financiamiento que se propone  a aprobación también del Congreso para así totalizar $523 b, suma que es igual al valor  de los gastos.



En efecto, son totales iguales donde  por el lado de los ingresos los componentes son  los tributarios por $305 b, los del crédito $156 b y otros $62 b.  En los gastos se encuentran   los de funcionamiento por $328 b , el servicio de la deuda $113 b y los de inversión por $82 b. Así el  principal rubro en ingresos es el de los tributarios y el de los gastos es el de funcionamiento y sus niveles comparados  no son muy diferentes.

 

De la anterior composición se puede observar que a manera de ejercicio aritmético con los ingresos tributarios se paga los gastos de funcionamiento, con los ingresos del crédito se paga el servicio de la deuda y con lo que sobra de esto al sumarlo  con los ingresos  contenidos en “otros”  se paga los gastos de inversión. Este ejercicio se puede hacer  por la similitud numérica entre los rubros componentes de ingresos y gastos pero en la práctica no sucede  exactamente así por las dinámicas propias entre los ingresos y gastos.

 

Lo que se quería mostrar es el tamaño relativo de la deuda (o crédito) en ambos lados tanto en ingresos como en  gastos del PGN y el mecanismo que opera en su registro ya que por el lado de los ingresos, endeudarse  consiste en  tomar  créditos  y por el lado de los gastos se trata de  pagar el servicio de la deuda y  por el lado de los ingresos se incrementa el endeudamiento y por el lado de los gastos se comprometen recursos para pagar  deuda. En este caso del PGN del 2.025 los ingresos por créditos cubren la totalidad de los pagos por servicio de la deuda y hay un excedente del 38%. Nuevamente se aclara es solo un ejercicio aritmético entre componentes del PGN pero que muestra también en este caso que los  créditos para endeudamiento superan  a los pagos de deuda  con el consecuente efecto  neto de acumulación de deuda.

 

También con ese ejercicio se buscaba mostrar que los ingresos por concepto de la tributación  alcanzan  a cubrir la mayoría, el 93%  de los gastos de funcionamiento y que los demás ingresos agrupados en "otros"  permiten pagar el 76% de los  gastos de inversión.

 

Con respecto a  la anterior descomposición de ingresos y gastos del PGN a continuación se presentan los componentes del gasto de funcionamiento y de los ingresos tributarios que como fue mencionado antes alcanzan un valor de $328 b y de $305 b respectivamente. Los primeros o sea los gastos de funcionamiento  representan el 63% del total de gasto y se encuentran allí  los gastos de personal $60 b, adquisición de  bienes y servicios $15 b y transferencias corrientes por $252 b. Estas últimas son los recursos  que van (junto con los de inversión) para obras sociales públicas en educación, salud, defensa,  vivienda y pensiones.

 

En cuanto a  los ingresos tributarios que representan el 58% del total, se encuentran allí los recaudos de impuestos internos como renta, Iva y patrimonio por $267 b y los impuestos externos como los aranceles por $38 b.

Por lo tanto al hacer  una observación simplificada de los componentes de estos dos últimos rubros, se puede inferir que un incremento en los ingresos tributarios debe conducir a un incremento en los gastos de funcionamiento y por lo tanto a un mayor desarrollo económico y social.



Finalmente el PGN del 2.025  comparado con el del año 2.024 permite observar que los gastos de funcionamiento suben de 61.4% a 62.7% del total, el servicio de la deuda sube de 18.8% a 21.5% y la inversión baja de 19.8% a 15.8% . La explicación oficial es que para atender el servicio de la deuda que creció de un año a otro más de 2 puntos porcentuales fue necesario bajar  los recursos para inversión mientras que los gastos de funcionamiento si crecen por atender servicio público en educación principalmente aunque también para  salud y defensa.

 

Además también la inversión fue el componente de gastos que se escogió para bajar ya que según la exposición de motivos del PGN de 2.025 ya  había sido necesario  incluir la aprobación de una ley de financiamiento por $12 b para que con esos recursos se equilibre por el lado de los ingresos el total de gastos que fue de  $523 b. Se advierte en la presentación del PGN que en el caso de no aprobación de dicha ley  tendrá que ser recortado el gasto total.      

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